Hi! LACTOSA

¿Los alimentos más ricos en lactosa?

La razón por la que vemos tantos productos etiquetados como “sin lactosa” es porque muchas personas son propensas a la intolerancia a la lactosa.

La lactosa es el azúcar presente en la leche, un carbohidrato complejo que se vuelve más difícil de digerir con el tiempo. Además, la lactosa está en muchos alimentos de la dieta moderna.

Normalmente, la lactosa es descompuesta por la lactasa, una enzima producida en el intestino delgado. Sin embargo, en personas con intolerancia a la lactosa, esta enzima no se produce en cantidad suficiente, lo que provoca síntomas incómodos como hinchazón, dolor abdominal y gases.

La lactosa se encuentra incluso en productos inesperados como patatas fritas con sabor y en algunos medicamentos, donde se usa como agente texturizante, conservante o excipiente. Aquí te presentamos diez alimentos con alto contenido de lactosa que deberías consumir con moderación si eres intolerante a la lactosa.

Aquí te presentamos alimentos con alto contenido de lactosa que deberías consumir con moderación si eres intolerante a la lactosa.

Leche en Polvo

La leche en polvo tiene un alto contenido de lactosa, con unos 51 gramos por cada 100 gramos de producto en su versión desnatada. Aunque está destinada principalmente a los niños, que rara vez son intolerantes a la lactosa, los adultos deben tener cuidado.

Leche condensada

Leche condensada contiene entre 9.5 y 12.5 gramos de lactosa por cada 100 gramos, lo que la hace poco recomendable para quienes tienen intolerancia a la lactosa. Las personas con intolerancia parcial pueden consumir hasta 12 gramos de lactosa al día sin experimentar síntomas.

Leche de vaca

La leche de vaca es uno de los principales productos lácteos afectados por la intolerancia a la lactosa, con 48 gramos de lactosa por litro. Los productos derivados de la leche de vaca, como el arroz con leche y los helados, también son ricos en lactosa. La leche sin lactosa es una buena alternativa.

Leche de cabra

La leche de cabra similar a la leche de vaca, la leche de cabra contiene 48 gramos de lactosa por litro, por lo que no es una buena opción para los intolerantes a la lactosa. Es mejor optar por leche con lactosa reducida o bebidas vegetales como las de almendra, avena, soja o arroz.

Leche de Oveja

La leche de oveja aunque tiene un poco menos de lactosa que la leche de vaca y cabra, la leche de oveja aún contiene 46 gramos de lactosa por litro. Debe consumirse con moderación si se tiene intolerancia a la lactosa.

Natas y Gelatinas de leche

Tanto la nata fresca como la batida contienen entre 2.5 y 4 gramos de lactosa por cada 100 gramos. La mantequilla, en cambio, tiene un contenido muy bajo de lactosa, con apenas 1 gramo por cada 100 gramos.

Requesón y Queso

No todos los quesos tienen alto contenido de lactosa. Los quesos frescos son ricos en lactosa, mientras que los quesos semiduros, extraduros o duros contienen solo trazas de lactosa. El queso emmental es una mejor opción que el requesón para quienes tienen intolerancia a la lactosa.

Chocolates

El chocolate con leche, generalmente, el chocolate con leche contiene unos 7.2 gramos de lactosa por cada 100 gramos. Es recomendable reducir el consumo de chocolate con leche, cremas para untar y galletas rellenas de chocolate si se tiene intolerancia a la lactosa.

Yogurt

Yogures industriales, la mayoría de los yogures naturales y con sabor que se encuentran en los supermercados contienen lactosa.

Es mejor optar por versiones vegetales o hacerlos en casa.

Charcutería

La charcutería como embutidos, morcillas, salchichas y patés suelen contener lactosa para mejorar su textura y conservación. En algunos casos, las carnes cocidas tienen más lactosa que el queso. Si eres intolerante a la lactosa y te gusta la charcutería, elige jamón curado, foie gras entero y la mayoría de los jamones curados.

Semillas y Granos

Las semillas y legumbres como los frijoles, habas, lentejas, garbanzos y guisantes partidos son una alternativa saludable respecto de las proteínas y las vitaminas derivadas de los lácteos, pero contienen porciones de lactasa que pueden causar flatulencias e inflamación.